Como en el caso de otros artistas, el maestro Nishizawa encontró fascinación en las manifestaciones populares de Semana Santa. Entre 1949 y 1956 se acercó, con esa actitud de respeto que lo caracterizaba, a las representaciones de la Pasión de Cristo en Taxco e Iztapalapa.
Además del drama de la Pasión, otras festividades también han dado tema las obras del maestro, dejando plasmada tanto en sus pinturas como en sus dibujos, la relación existente de estos temas religiosos con la idiosincrasia del pueblo mexicano.
Desde la fundación del Museo-Taller Luis Nishizawa, el maestro manifestó su interés de que en dicho recinto se rescataran y preservaran las tradiciones populares, especialmente la “Quema de Judas de Semana Santa” y la colocación del “Altar de Muertos” los días 1 y 2 de noviembre.
Los Judas son figuras de cartón y carrizo de diferentes tamaños que contienen pólvora. Estas figuras representan a Judas Iscariote y originalmente simbolizaban su traición a Cristo, pero con el tiempo derivaron en la imagen del diablo como encarnación de lo maligno.
Al paso de los años también se comenzó a representar figuras del diablo, imágenes fantásticas con temas malévolos y demás personajes que, por su comportamiento negativo, son rechazados por la comunidad para mostrarlos de manera satírica.
Estas representaciones eran colgadas en las calles, afuera de las pulquerías, carnicerías o tiendas de abarrotes ante la alegría popular, durante el Sábado de Gloria, encendiendo la pólvora que contienen en su interior para así explotar y terminar quemados.
Por iniciativa del maestro Nishizawa, en 1994 se convocó por primera vez a todos los artesanos pirotécnicos del Estado de México a participar en un concurso para la elaboración de Judas gigantes de dos a cuatro metros de altura, contribuyendo al rescate y continuidad de esta tradición popular.
A partir de entonces se hace una exposición de estas figuras durante varios días en las instalaciones del museo. El sábado anterior a su quema, se seleccionan algunos y se organiza un desfile acompañado de bandas de música, se realiza el “Paseo de los Judas” por las principales calles de la ciudad y, finalmente, se queman en la Plaza Cívica de Toluca.
Los artesanos pirotécnicos que participan en este concurso son provenientes de localidades del Estado de México como Tultepec, Capulhuac, Villa Nicolás Romero, Metepec, San Mateo Tlalchichilpan, San Miguel Ameyalco, Lerma, Ocoyoacac y Toluca.
Localidades que concentran a las familias de artesanos dedicados a la pirotecnia, las cuales, de generación en generación, han transmitido sus conocimientos para elaborar estas piezas de arte efímero, pero con un gran valor artístico popular y un sentido crítico de lo que acontece en la sociedad.
Que cada una de tus pinceladas sea un descubrimiento de nuevas posibilidades.
Explorando las Tradiciones Populares con el Maestro Nishizawa
1. Introducción
- Breve descripción del interés del maestro Nishizawa en las celebraciones populares de Semana Santa y otras festividades.
2. La Fascinación por la Pasión de Cristo
- El acercamiento del maestro a las representaciones de la Pasión de Cristo en Taxco e Iztapalapa entre 1949 y 1956.
3. Celebraciones Festivas como Inspiración Artística
- La influencia de diversas festividades en las obras del maestro Nishizawa, destacando la relación entre los temas religiosos y la cultura mexicana.
4. Rescate y Preservación de Tradiciones
- La fundación del Museo-Taller Luis Nishizawa y el compromiso del maestro con el rescate y preservación de tradiciones populares como la «Quema de Judas de Semana Santa» y el «Altar de Muertos».
5. El Significado de los Judas en la Cultura Popular
- Exploración del simbolismo detrás de las figuras de Judas, desde su representación original hasta su evolución como símbolos del mal y la crítica social.
6. Concurso de Judas Gigantes
- La iniciativa del maestro Nishizawa para organizar un concurso de Judas gigantes en 1994, involucrando a artesanos pirotécnicos del Estado de México.
7. Celebración y Quema de los Judas
- Descripción del proceso que rodea la exposición, selección, desfile y quema de los Judas gigantes, culminando en una explosión de pólvora en la Plaza Cívica de Toluca.
8. El Legado de los Artesanos Pirotécnicos
- Reconocimiento a las familias de artesanos dedicadas a la pirotecnia, quienes de generación en generación han transmitido sus conocimientos para elaborar estas piezas de arte efímero con un profundo valor artístico y crítico.
9. Conclusiones
- Reflexión sobre la importancia de preservar y valorar las tradiciones populares como parte del patrimonio cultural de México.
